martes, 17 de abril de 2007

Sesiones dobles: "2046" / "Deseando amar" de Wong Kar-Wai

Primer trayecto: recalando en "2.046"Hay un tren que corre hacia delante; pero en el que sus pasajeros se empeñan en avanzar, una y otra vez, hacia atrás. Debido a este curioso efecto, las paradas son intemporales, casi situándose caprichosamente en distintos puntos del tiempo y el espacio.

Lo único claro parece ser su destino: la habitación 2046, donde nunca cambia nada. De la que algunos parecen salirse con facilidad; la mayoría, nunca.
Si se requiere, por el trayecto, el viajero puede disponer de una androide, una “auxiliar de cabina” la llaman. Ella puede aliviar sus ansias. Es la perfección, y también pura frialdad. La regla es que nadie debe enamorarse de ella, jamás. Se le puede confiar los secretos, sensaciones y suspiros, pero no comprenderá. Quizás, quizás, quizás…
Segundo trayecto: recalando en "Deseando amar".Y, como en ese tren, seguimos retrocediendo. Una pareja va enamorándose. Sus idas y venidas parecen ser las mismas; confundiéndose en su ritual de encuentros y desencuentros. Mientras, el humo de un cigarrillo nos recuerda que todo es efímero, que la felicidad está hecha a retazos de instantes.
Deseando amar, y retener ese momento perfecto. Para ello acudiré a lo que sea, a los recuerdos, a las canciones, a rememorar los gestos de la persona querida, sus palabras, a pronunciar su nombre, sea en voz alta o en lo más íntimo de nuestra mente. Y ello se efectuará a costa de comprometer el propio futuro, porque no se puede o quiere renunciar a ese pasado.
Wong Kar-Wai, desde Hong Kong, nso habla de aquello que no es posible tener y que, sin embargo, se posee para siempre.
Es una contradicción y un enigma, pero al mismo tiempo real y humano.
Las claves están en la habitación 2046 y en ese deseo de amar.
Tercer trayecto: recalando en "2.046" En "2046", película compleja, sugerente, fértil y abierta a numerosas lecturas, se nos introduce en un tren que es el del intento de seguir adelante. Pero nuestros recuerdos nos conducen hacia esa recóndita habitación que apunta hacia la memoria y el pasado, obligándonos a recalar en distinto puntos de nuestra existencia, en aquellos que nos han marcado. ¿Qué difícil es escapar a los recuerdos? Tal vez haya personas que consigan olvidar y rehacerse enseguida; la mayoría, nunca.
Por el camino podemos encontrar a otros que actúen como auxiliares, que calmen, ni que sea levemente, nuestra necesidad de cariño y sexo. Pero en realidad nadie puede escapar al sentimiento ni al recuerdo. Aunque sea por el simple roce prolongado con lo más humano, incluso una androide puede adquirir, con efectos retartados, cualidades humanas.
Cuarto trayecto: recalando en "Deseando amar"Antes, con "Deseando amar", Kong Kar-Wai había puesto el "2.046" en la puerta de la habitación de los dos amantes, un número que se convertirá en ese lugar y momento deseado por el protagonista. Y ¡todos tenemos ese espacio idílico!
También había sentado cátedra en sus postulados. Los gestos y miradas de los amantes; los instantes que apenas permanecen unas fracciones de segundo; la repetición cíclica de los hábitos y conductas; el laberinto espacio-temporal de los recuerdos y los secretos; y la exquisita atención en los detalles.
En esos amores imposibles, en esos momentos insubstituibles, reside la esencia del anhelo, del tormento y la felicidad.
Wong Kar-Wai se ha erigido como el cineasta del deseo y la memoria. A degustar con los sentidos, a sublimar con la reflexión.
Este post ha surgido como idea e iniciativa de los blogs The Observer y Natalia Book.
Blog organizador: The Observer, de Jazzman.

24 comentarios:

jazzman dijo...

Muy original tu propuesta, me ha encantado. Tu frase final es genial "a degustar con los sentidos, a sublimar con la reflexión".

Que grande es este director!

Saludos!

alicia dijo...

Muy bien considerar las dos películas como un recorrido de tren, en el que van y vienen los protagonistas, retrocediendo y adelantando en el tiempo. Me ha gustado.

Anónimo dijo...

Genial el post. Me quedo con 2046, no sé por qué me gustó más y ambas bandas sonoras, claro.

Carles Rull dijo...

Jazzmann: Un director grande e inabarcable, como los auténticos genios. Porque mira que me he dejado temas en el tintero, como su erotismo, o la música.

Alicia: Un retroceso y un avance marcado por la memoria. Esos recuerdos que van y vienen. ¿Y a quien se le ocurre hacer unas películas así, sin que le tilden de incomprensible o pesado?

Florinda Chic: También prefiero "2.046". La encuentro más abierta a sugerencias, más completa... Y aunque las dos bandas sonoras son memorables, me quedo también con el tema principal para "2.046" que compuso Shigeru Umebayashi. No he podido colgarlo por falta de tiempo. A ver si hoy lo pongo.

Hatt dijo...

Pues yo, aunque sólo sea por incordiar (que no), prefiero "In the Mood for Love".

En cuanto al comentario, sí que es original y propio disponerlo en forma de recorrido. Además, siempre hay gente en el andén, gente que se queda y gente que se despide...

Nos leemos.

Carles Rull dijo...

Hatt: Para nada es un incordio. Al contrario,"Deseando amar" fue el descubrimiento. Y diría que la idea generalizada es considerarla mejor, más redonda, que "2.046", aunque no sea mi opinión.
Y la riqueza de ambas películas es que cualquier escena, cualquier detalle, como el que citas sobre el andén, se abre a múltiples sugerencias e interpretaciones.

Un saludo !

Donnie dijo...

Sin duda dos grandes películas y una propuesta cinéfila magnífica...

Espero con ansia la película My Blueberry Night de este director! y con el reparto qe tiene aún mas!

Ah se me olvidaba! me preguntaste un email de contacto:

tengo uno de hotmail/ messenger que es gilthanas_62@hotmail.com y otro de yahoo pero ese es para pedidos por internet alexspain18@yahoo.com

Un saludo!

ekilore dijo...

ufff!! qué curioso enfoque!! alucino con las diferentes interpretaciones de un mismo film que estoy leyendo!
me ha gustado mucho lo de los cuatro trayectos, como si nos detuviéramos en cuatro estaciones diferentes.

me parece muy interesante la idea que lanzas de que nadie puede escapar al sentimiento y al recuerdo.

es como si fueran estos recuerdos los que nos atraparan impidiéndonos alcanzar felicidades alternativas a las que nosotros nos hemos autodestinado.

muy curioso.
saludos :)

Carles Rull dijo...

Donnie: Creo que la nueva película de Wong Kar-Wai inaugurará Cannes (tampoco estoy ahora mismo seguro). Y me anoto tus e-mails. ¡Gracias!

Ekilore: Tantas interpretaciones demuestran la riqueza de las propuestas del cine de Wong Kar-Wai. Y creo que aferrarse a según que recuerdos nos impiden avanzar, y en ocasiones pueden llegar a determinar toda una vida. La memoria y el sentimiento son realmente complejos, e intentar materializarlos en cine, ¡ya, ni te cuento!

Saludos !

Natalia Book dijo...

Creo que escribes una de las mejores frases sobre las películas:

"aquello que no es posible tener y que, sin embargo, se posee para siempre."

Resume completamente lo que yo quise expresar con muchas más palabras.
Genial.
Saludos

Himnem dijo...

Este proyecto cada vez me gusta mas, porque no paro de ver distintas opiniones y enfoques de la pelicula y con todas estoy totalmente deacuerdo. Estas peliculas...me estan marcando!

Y supongo que ya todos lo sabremos pero...que GRANDISIMO director es Wong Kar-Wai...PERO GRANDE enn!!

SALudos

Carles Rull dijo...

Natalia Book: ¡Gracias!

Himnem: Nos demuestra lo muy limitado que es una obra si se queda sólo con una interpretación (aunque sea la propia).

Rosenrod dijo...

Enhorabuena por el post, Cineahora. Particularmente, yo también prefiero "In the Mood of Love": para mí, "2046" tiene algo de versión corregida y aumentada que me bloquea un poco, frente a lo más esencial y destilado de la primera; pero el díptico es extraordinario, eso está claro.

Y respecto a nuestras propias habitaciones 2.046... nada hay más cierto en lo que dices.

Un saludo. Y enhorabuena a todos los que participáis en esta estupenda iniciativa.

Carles Rull dijo...

Rosenrod: Es cierto que "Deseando amar" ya destilaba/depuraba lo esencial de la obra de Kar-Wai.¡Muchísima gracias, y un saludo también para ti!

Raquel dijo...

Yo también prefiero Deseando amar, me llegó más la historia. 2046 es, como dices, para degustar más con los sentidos, aunque estén embotados, no quedan indiferentes.

Anónimo dijo...

gran blog el tuyo.
Tengo un amigo que dice que 2.046 es de lo mejor que ha visto. Coincido con él en que la fotografía es buena pero no me enteré de nada más. Necesito que me la expliquen 20 veces.

Saludos, si quieres más cine pasate por mi blog.
blogs.hoycinema.com/jontorron

Estamos con un concurso donde repartiremos "grandes" premios.

Carles Rull dijo...

Raquel: Compruebo que "Deseando amar" va ganando, por puntos. ¡Pero las dos, son toda una experiencia!

Leolo: 20 veces, o 20-46, en cualquier caso espero que no le haya dejado indiferente y guarde un buen recuerdo.

Rfa. dijo...

2046 me decepcionó, qué quieres que te diga. Y creo que en parte lo hizo porque, como muy bien señalas en tu post, es una película metafórica. No soy muy dado a las metáforas en cine; las prefiero en literatura. En tu post hablas de un tren que funciona como la vida (más o menos) y me casa bien. Pero soy incapaz de tragarme una historia donde realmente aparece ese tren y realmente funciona como puente entre el pasado y el futuro. No sé, quizás tengo un pobre temperamento poético. O quizás, simplemente, siento que esta película no encaja con la anterior.

Mer dijo...

INCREIBLE PELÍCULA. Una de las mejores, de las que más me sorprendieron en los últimos años.

Beso.

Carles Rull dijo...

RFA.: Se agradece que también haya alguien que no esté de acuerdo con "2.046", y que hable de decepción.

Hay cine: Totalmente de acuerdo, aunque no sé si se refiere a "2.046" o a "deseando amar".

Anónimo dijo...

Hay un cine que atrapa e hipnotiza y éste es una muestra. Muy acertada la forma de postear sobre el tema. Saludos.

Carles Rull dijo...

Gabriela: Sin duda, sin duda alguna.

Desesperada dijo...

hola! no llegué a comentar durante las sesiones dobles, en las que participaba con mi blog la mujer justa, porque andaba a mil! pero hoy por fin he tenido tiempo de leerte y me ha parecido uno de los mejores posts de todo el grupo, por la originalidad de su propuesta. yo flipé con las dos películas, la verdad, pero sobre todo con in the mood for love, que me parece una obra de arte.

bicos!

Carles Rull dijo...

Una mujer desesperada: Yo, tengo que añadir, que cuando vi por primera vez "In the mood for love" me dejó algo frío. Pero es de esas películas que ganan cuando más piensas en ellas, o con el tiempo. Y... ¡gracias!