martes, 24 de julio de 2007

Comida basura, sociedad basura

"Fast food nation" (Richard Linklater, 2006)

Consumir rápido. Morir tranquilo. Y es que no hay nada como cerrar los ojos ante los problemas que nos rodean. Cuestión de impotencia, o de supervivencia. Gus Van Sant ya recurrió a el título de “Elephant” para hacer referencia a un gran problema, que como un elefante instalado en el salón de nuestra casa, lo vemos, sabemos que está allí pero preferimos ignorarlo en lugar de buscar soluciones.
Y Richard Linklater (“A scanner darkly”) le da otro mazazo al llamado “sueño americano”, que de paso también nos salpica a todos.
Basándose en la novela de Eric Schlosser, que él mismo ha adaptado junto a Linklater, muestra la trastienda de las cadenas de comida rápida, representadas en el nombre de “Mickey's” y su fabulosa hamburguesa “Big one”, para trasladarnos hasta el matadero. El de miles, millones de cabezas de ganado vacuno sacrificados y manufacturados a toda pastilla para satisfacer la demanda consumista. Pero también el de miles, millones de seres humanos que deberán sacrificar sus deseos y esperanzas, malviviendo en precarias condiciones laborables; o renunciando a sus idealismos.
La trama cruza historias paralelas, sobre todo el de un grupo de inmigrantes mejicanos (representado por las hermanas que interpretan Catalina Sandino Moreno y Ana Claudia Talancón), símbolo de esa mano de obra barata, para fabricar comida barata y ser engullida de manera tan barata como rápida. Comida basura como un síntoma más, no el único, de una sociedad mecanizada, donde no importan las personas, sinó los beneficios el negocio económico.

No es la película de Linklater un prodigio de narración cinematográfica. Su ritmo se demora, incluso se detiene en escenas y personajes prescindibles o de desigual interés. Y su discurso, sin soluciones, resulta a la par tan inútil como ese intento de rebelarse contra el sistema que iniciarán un grupo de jóvenes idealistas por liberar a las miles de vacas hacinadas y esperando su hora.
Pero, más allá de su denuncia, hay poderosas razones para verla. Unos inolvidables planos de presuntamente impolutas hamburguesas saliendo de la cadena de fabricación, a punto para empaquetarlas, distribuirlas y servirlas. O el rostro final de Catalina Sandino Moreno, aceptando con horror su nuevo puesto de trabajo.
Así como una impagable escena entre Greg Kinnear y un Bruce Willis, presencia breve y contundente, hablando de los posibles trapicheos de la compañía encargada de elaborar las hamburguesas. Con predominio de la, en el fondo, práctica ración de cinismo y mala uva de la intervención del personaje de Willis, y su consejo que “Sólo hay que asarla. Es lo único que hay que hacer. Asa la carne y no te pasará nada”.
Así es, menos miramientos, paranoias y delicadezas, cuando el posible problema de la carne contaminada con mierda tiene una solución tan simple como rápida. Otra cosa es que ello sea un símbolo más del egoismo y la progresiva deshumanización de las sociedades. Pero para evitar dolores de cabeza, pidamos otra hamburguesa, que sea barata, grande y esté bien asada; que el mundo ya se arreglará solo, tal vez mañana.

Valoración: ( *** )

(*****) Obra maestra. Disfrute total.
(****) Me ha gustado muchísimo. ¡Una maravilla!

(***) Me ha gustado. Buena película,
(**) Me ha gustado, pero con reparos.

(*) No me ha gustado, pero tiene sus "cosillas"
(●) No me ha gustado nada, pero si le apetece, usted mism@

11 comentarios:

jazzman dijo...

La tengo pendiente y es una de mis prioridades, me encanta las críticas a las grandes cadenas de comida basura, son un blanco tan fácil...

Saludos!

Rosenrod dijo...

Y sin embargo, es una lástima que intenciones con las que (casi) todos podemos estar de acuerdo diluyan un tanto su fuerza por un planteamiento cinematográfico que podría haber sido mejor.

Un saludo!

Carles Rull dijo...

Jazzman: Lo de la crítica a las cadenas de comida basura, la verdad, sólo es una mera excusa para intentar reflejar otros temas (trabajos basura, política basura...)

Rosenrod: Así es. Le sobra metraje y algun personaje. Le falta algo más de talento cinematográfico. Pero, hay escenas y momentos que se recuerdan. Eso ya vale la pena.

Saludos.

Unknown dijo...

no la veré ni aunque me la regalen con el menú big mac... y eso que suelo seguir sus recomendaciones, pero me da a mí queee...

queee no.

Un saludo

Carles Rull dijo...

Jesús David: Bueno, decidido le veo, a no verla.

BUDOKAN dijo...

Este film que a mi juicio no es del todo feliz en su factura nos muestra las dos caras de Linklater, la del genio y la del común. Saludos!

Carles Rull dijo...

Budokan: Muy aguda su apreciación sobre las dos caras que muestra Linklater en materia cinematográfica.

Goethemola dijo...

Bueno, ya conoces mi opinión sobre la peli. Estoy bastante de acuerdo contigo, aunque a pesar de ser consciente de que la película adquiría un ritmo lento, en ningún momento me agobió. Eso sí, encuentro que le falta algo de mordacidad.

Totalmente de acuerdo con tu comentario sobre la actuación de Bruce Willis, aunque Ethan Hawke también realiza un buen papel.

Carles Rull dijo...

Goethemola: Ethan Hawke aparece por allí interpretando a un 'alter ego' del mismo Linklaker. Me caen bien los dos, pero en esta ocasión, sus escenas y consejos me parecieron como una especie de paréntesis en toda la trama.

Goethemola dijo...

No, no, no me malinterpretes, estoy totalmente de acuerdo contigo en que la intervención de Willis es mucho mejor y más trascendente que la de Hawke, pero sólo quería puntualizar que a pesar de las diferencias, su papel también está muy logrado a pesar de eso, de que 'aparentemente' no pinte nada.

Carles Rull dijo...

Goethemola: A mí también me cae bien el amigo Ethan Hawke.